Los países de América Latina y el Caribe han sido duramente golpeados por la crisis derivada del COVID-19 y el alza de los precios de los alimentos y de la energía. Las consecuencias de estas crisis superpuestas en los ámbitos económico, social y político se derivan en parte de condiciones institucionales preexistentes en la región, incluyendo la baja confianza en las instituciones, la polarización política y social, y el debilitamiento de los partidos políticos.

A través de esta conferencia se pretende analizar cómo se pueden superar estos desafíos, que obligan por avanzar en múltiples frentes, definiendo en muchos casos nuevos contratos sociales e instituciones que los sustenten. La directora regional para América Latina y el Caribe del PNUD, Michelle Muschett; y dos expertos en desarrollo humano, Heriberto Tapia y Leandro Prados de la Escosura, hablarán sobre las dinámicas de la polarización en tiempos de incertidumbre, las consecuencias de la polarización en la deliberación pública y la necesidad de una acción colectiva para avanzar en materia de desarrollo.  Todo ello se debatirá en el marco de los hallazgos del Informe de Desarrollo Humano 2021/2022.

Así, un requisito fundamental para definir los cambios necesarios, y que perduren en el tiempo, es que estos emerjan de procesos de deliberación pública y elección social. Sin embargo, en la actualidad estos procesos están sufriendo tensiones en muchos países dado un contexto de intensificación de la polarización y de división política, agravadas a su vez por la incertidumbre y la inseguridad imperante. Los espacios de deliberación pública se reducen justo cuando más se necesitan.